Rodolfo Santana, dramaturgo venezolano.

Resumen

El texto constituye un testimonio autobiográfico y crítico de Guillermo Schmidhuber sobre su amistad intelectual y humana con el dramaturgo venezolano Rodolfo Santana, articulado como una reconstrucción narrativa basada en experiencias compartidas a lo largo de diversos encuentros teatrales internacionales. El planteamiento central es mostrar cómo el intercambio creativo, la colaboración constante y la formación de un colectivo dramatúrgico iberoamericano —GEDI o “La Patota”— influyeron en el desarrollo de nuevas metodologías de creación para jóvenes dramaturgos, promoviendo un modelo de taller que combinaba lectura crítica, correspondencia formativa y revisión presencial de obras en proceso. La metodología del texto es eminentemente testimonial y cronológica: el autor recurre a memorias personales, anécdotas, cartas y episodios significativos ocurridos en festivales, congresos y talleres de dramaturgia en Washington, Puerto Rico, Caracas, Madrid y Guadalajara. Sus objetivos son preservar la memoria de Santana, destacar su aporte a la dramaturgia latinoamericana y documentar la manera en que su humor, sus ideas y su liderazgo ayudaron a consolidar un espacio de fraternidad creativa. En cuanto a sus alcances, el escrito ofrece una valiosa fuente para la historia reciente de la dramaturgia iberoamericana, además de recuperar documentos personales y experiencias que iluminan el proceso creativo colectivo.